La audiencia de evaluación y preparatoria de juicio por la desaparición y ejecución extrajudicial de Francisco Cajigas -desaparecido y hallado sin vida en noviembre de 2015 en la laguna de Yaguarcocha, Ibarra- se difirió para el martes 19 de noviembre de 2024 a las 10h00, en la Unidad Judicial Penal de esa ciudad.
El juez Edwin Cahueñas suspendió la diligencia que debía llevarse a cabo el martes 29 de octubre de 2024 porque uno de los procesados, el policía Juan Carlos T., no asistió a la audiencia. Asimismo, se sumó un nuevo abogado a la defensa de los acusados, sin embargo, esto no se considera causal suficiente para el aplazamiento.
“Expusimos al juez nuestra negativa a toda dilatación procesal en vista de que llevamos nueve años pidiéndole a la administración de justicia verdad, justicia y reparación. De la misma manera, Fiscalía se opuso a esta dilación y manifestó que la defensa recién agregada ya había comparecido al proceso fiscal y que tenía conocimiento del mismo”, señaló Diana Salomé León, asesora legal de la Fundación Regional de Asesoría en Derechos Humanos (Inredh).
A la audiencia asistieron los familiares de Francisco Cajigas Botina, quienes viajaron desde Pasto, ciudad del departamento de Nariño, al sur de Colombia, y que estaban expectantes a que después del dictamen acusatorio, el juez llame a juicio a Jaime A. y Juan Carlos T. No obstante, el diferimiento los desalentó, así lo manifestó Andrés Cajigas Ruiz Botina, hermano de Francisco:
“Mi familia lleva tantos años en la lucha y nos sentimos mal. Viajamos desde tan lejos con la esperanza de que suceda algo. Entendemos los procedimientos, pero nos decepciona lo ocurrido, nos sentimos revictimizados por el aplazamiento. Sin embargo, seguiremos respetando el proceso y confiando en el equipo que nos acompaña desde que iniciamos esta lucha por Francisco”.
Contexto
Francisco Cajigas, un joven colombiano de 30 años, desapareció en Ibarra el 17 de noviembre de 2015 y fue encontrado sin vida 13 días después en la laguna mencionada. La autopsia reveló que murió debido a un traumatismo encefálico producido por un objeto contundente, lo que apunta a una muerte violenta.
La investigación se ha comprometido con la manipulación de pruebas en el Centro de Investigación de Ciencias Forenses de Esmeraldas, donde el cráneo de Cajigas se separó de su cuerpo y la lavó con un químico fuerte, comprometiendo pruebas de ADN cruciales.
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