José Inocencio Tucumbi Vega, de 50 años, salió de su comunidad Juigua Yacubamba, en Pujilí, hacia la ciudad de Quito para participar en el paro nacional. El 9 de octubre falleció durante el paro nacional en el hospital Eugenio Espejo, tras ser embestido por agentes de la Policía Nacional, en la ciudad de Quito.
Inocencio fue un líder que administraba las comunidades, hacía gestiones y era participativo en el Movimiento Indígena Campesino de Cotopaxi (MICC). Un año después de los hechos, su hijo Ángel Tucumbi, nos comenta: “este año ha sido muy doloroso para nosotros, ha sido muy duro recuperarse de la situación de que se fue mi padre. Como comenzó esta pandemia las investigaciones se quedaron ahí, esperemos que logremos seguir en el proceso. Estamos golpeando todas las puertas de los dirigentes para que el caso no quede impune. Mi padre no era un animalito, sino que es mi padre quien falleció”.
También, recuerda que él junto a su padre y su familia el mes de octubre del año anterior salieron a protestar contra las medidas económicas impulsadas por el gobierno, no solo por los indígenas, sino por todos. “Así era mi padre de salir a las calles a protestar –dice Ángel-, no solo para nosotros sino para el país y para el pueblo campesino indígena, mestizo, cholo. Por eso salimos a las calles y protestamos”.
Para Ángel, los responsables de la muerte de su padre es el gobierno que los reprimió cuando salieron a exigir sus derechos. Ahora, la familia Tucumbí Tulmo denuncia que de parte del Estado no han recibido ninguna visita durante este año, que la ayuda que han recibido son de las organizaciones y comunidades amigas que los han apoyado en esta situación tan dura que vive y que se ahondo con la pandemia. “No hemos podido salir a trabajar, esperemos que podamos trabajar luego para vender algo en los mercados – dice Ángel-, esperemos que pronto pase esta situación que estamos para poder vender papas, habas y así poder seguir adelante”.
También su otra fuente de ingresos económicos se ha visto limitada, los siete hermanos Tucumbí son músicos al igual que su padre Inocencio, pero ahora con la pandemia no han podido continuar con su trabajo. “Mi padre era un músico y tocaba los platillos, la trompeta, el trombón, el bombo y nos heredó una agrupación que se llama Los brothers del Ecuador, solo hermanos. Nos heredó y gracias a mi padre queremos seguir luchando hasta donde se pueda”.
Un año después de la muerte de Inocencio Tucumbí
629