Este viernes, 13 de agosto de 2021, a partir de las 10:00, representantes de la Dirección Zonal de Guayas y de la Oficina Técnica de Guaranda del Ministerio de Ambiente, Agua y Transición Ecológica (MAATE) y técnicos de la Agencia de Regulación y Control del Agua (ARCA) realizarán una inspección y verificación técnica in situ, en el marco del cumplimiento de la Resolución del Recurso Extraordinario de Revisión Nro. 2018-008.
Este recurso fue presentado en 2018, por alrededor de 450 personas campesinas e indígenas afectadas por la distribución de aprovechamiento de aguas de la cuenca del río Dulcepamba, en el cantón Chillanes de la provincia Bolívar. Su objetivo: la reversión de la autorización de agua a la compañía hidroeléctrica Hidrotambo S.A., debido al incumplimiento de estudios técnicos y a la priorización del uso del agua estipulada en la Constitución del Ecuador.
Para el cumplimiento de este recurso, las comunidades exigieron al MAATE y al ARCA que se inicien inspecciones de control de las actividades de la hidroeléctrica, de las cuales se han realizado dos y una visita in situ, que han dado como resultado dos informes emitidos por el ARCA.
En el primero que surge como acompañamiento de la visita in situ de la Defensoría del Pueblo, realizada el 22 de octubre de 2020, el ARCA determinó que “existía un muro de piedra del tamaño del ancho del río […] y una infraestructura de canal bloqueada con piedras […], obra que al momento de la inspección no permitía el paso de caudal por el cauce natural del río y del caudal ecológico”.
Y por otro lado, en el segundo informe realizado en el marco del control de cumplimiento de obligaciones realizado a Hidrotambo, la misma institución concluyó que la hidroeléctrica “capta un caudal mayor al autorizado en el Recurso Extraordinario de Revisión 2018-008, mismo que establece para el mes de noviembre un valor de 0,3 m3/s”. Asimismo, evidenció que “no permite el paso del caudal ecológico de 1,46 m3/s a la altura del sitio de la toma”.
En este mismo documento de 226 hojas, el ARCA citó las inspecciones realizadas el 30 de noviembre de 2020 y el 11 de diciembre del mismo año, explicando que en la primera “[…] se observó el paso de infiltraciones mínimas de agua que atraviesan un muro de piedras construido en la totalidad del ancho del río Dulcepamba y que desvía su cauce natural hacia la Central Hidroeléctrica San José del Tambo.
Y en la inspección realizada a finales de 2020 “se observó una cantidad mínima de caudal circulando por el sitio de la toma, debido a que en un extremo del muro de piedras existía un pequeño tramo descubierto, es decir, que algunas piedras fueron retiradas”.
Para Yasmín Calva, abogada de las comunidades afectadas, “llama mucho la atención que la institución que tiene como deber regular y controlar, verifique, en estas tres actividades, la existencia de un muro que no permite el pase del caudal ecológico y no se haya iniciado un proceso administrativo en contra de la empresa por el uso inadecuado de la autorización”.
En ese sentido, Rosa Hernández, habitante de la comunidad San Pablo de Amalí, explica que actualmente sigue existiendo ese muro que no permite el desarrollo de la vida acuática del río. “Son alrededor de tres kilómetros de nuestro río que permanece seco debido a la captación de agua de Hidrotambo”.
Se prevé que el MAATE presente un informe de esta nueva visita, al término de ocho días, así lo señala en la notificación enviada a las comunidades del río Dulcepamba, ayer 11 de agosto. Las comunidades confían que con esta nueva visita, las autoridades pertinentes puedan emitir recomendaciones, ya sean para que se inicien procesos sancionatorios ante el MAATE o para que los implementen por el cometimiento de infracciones.
Las organizaciones sociales y de derechos humanos que acompañamos a las comunidades de la cuenca del río Dulcepamba, Fundación Regional de Asesoría en Derechos Humanos (Inredh), Comisión Ecumémica de Derechos Humanos (CEDHU) y Acción Ecológica, estamos atentas y vigilantes al cumplimento de la implementación de todas las medidas necesarias para evitar más afectaciones a las comunidades y al río Dulcepamba y exhortamos el inicio de procedimientos administrativos sancionatorios en contra de la empresa por el incumplimiento sistemático y reiterado en estos años.
A tres años de la presentación del Recurso Extraordinario de Revisión aún no existe una solución a su pedido, pese a que para octubre de 2019, la Ex Secretaría del Agua resolvió el Recurso, modificando el aprovechamiento exorbitante de agua que tenía la empresa. Además, le ordenó reconstruir su obra de captación, ya que esta infraestructura pone en riesgo a la comunidad San Pablo de Amalí ante las crecidas invernales.
CONTACTOS DE PRENSA:
Acción Ecológica – 099 274 7727
Fundación Regional de Asesoría en Derechos Humanos (Inredh) – 099 205 8099
Yasmín Calva, abogada de las comunidades – 098 984 9212
Técnicos realizarán una nueva visita a San Pablo de Amalí por incumplimiento a la resolución del Ministerio de Ambiente y Agua
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