Carta pública: se cumplen 30 días de la desaparición de Marlon Amagua Miño

El día de hoy se cumple un mes de la desaparición de nuestro hermano Marlon Amagua Miño. Luego de un mes de búsqueda e investigación por parte de su familia, sin intervención de ninguna autoridad pública, seguimos sin saber de nuestro hermano.

Esta carta pública es para expresar nuestra preocupación y dolor por la desaparición de nuestro hermano Marlon, pero también para expresar nuestra frustración y decepción del Estado, quien recién el día de ayer tomó la primera versión del caso, cuando ésta es una diligencia que se debe hacerse en las primeras 24 a 48 horas después de la desaparición.
Marlon Gonzalo Amagua Miño, de 22 años, de doble nacionalidad española y ecuatoriana,  se encuentra desaparecido desde el martes 23 de junio de 2020, día en que fue visto por última vez en el Centro Terapéutico “Nuevo Ebenezer”, lugar en el que se encontraba para rehabilitarse.
En este lugar se administraba a Marlon Amagua el siguiente tratamiento médico: Risperidona tabletas 500 mg medicamento para dormir, y Ácido Valpróico 1 mg fármaco antiepiléptico y estabilizador del estado de ánimo, no relacionado químicamente con otros medicamentos anticonvulsivos, medicamentos que hacían a nuestro hermano muy lento en su movilidad.
La desaparición de nuestro hermano nos fue informada el 23 de junio de 2020 a las 4 am. Los funcionarios de este centro nos dijeron que existió una fuga masiva de 9 personas en que se encontraba Marlon. Nos movilizamos al centro a las 5am y al llegar al Centro “Nuevo Ebenezer” nuestra primera impresión del lugar fue ver vidrios rotos y marcas de huellas de zapatos en la puerta principal.
Debido a que hasta las 06:30 am nadie nos abrió la puerta, fuimos a recorrer la zona, en donde nos encontramos con un policía, quién nos supo decir que la denuncia se tenía que hacer después de las 24 a 48 horas de la desaparición. Ahora sabemos, que ningún familiar tiene que esperar y que la denuncia tiene que ser inmediata. Al siguiente día de la desaparición, acudimos a la Dinased y pusimos la denuncia que se encuentra signada con el número 170102120062810.
En nuestra propia búsqueda por encontrar a Marlon, sin ayuda de ninguna autoridad, ni la Dinased ni la Fiscalía, conocimos que fue víctima de vejámenes contra su integridad, que lo habían esposado, desnudado, golpeado; lo habrían dejado en una tina con agua helado, lo habrían esposado a un árbol privándole de alimento por días y a una silla durante 15 días si poder ir al baño. Que lo habían obligado a comer 8 platos de comida, bajo amenazas y golpes, que tuvo que comerse incluso mientras vomitaba. Nos enteramos que lo trataban como un animal.
Con profundo dolor y frustración por la falta de actuación de la Fiscalía o la Policía, hemos preguntado nosotros mismos a los chicos de la fuga y conocimos hechos contradictorios en los que parecería que Marlon nunca se fugó del Centro Ebenezer.
Por esta razón, presentamos una demanda de habeas corpus ante el juez constitucional para que proteja el derecho a la libertad, integridad y vida de Marlon, la cual fue aceptada y dispuso medidas de reparación integral que entre otras requiere a la Fiscalía General del Estado lo siguiente:
(…) a través de la Unidad especializada de personas desaparecidas, dentro de la investigación previa No. 170102120062810, por la desaparición de Marlon Gonzalo Amagua Miño: a) ejecute en coordinación con la Policía especializada en estos temas, la búsqueda, a través de todos los medios disponibles, del destino o paradero de Marlon Gonzalo Amagua Miño; b) Coordine con el ente estatal respectivo la difusión a todo nivel y por todo medio disponible, sobre desaparición de Marlon Gonzalo Amagua Miño; c) Realice toda diligencia necesaria y pertinente que le permita recolectar los indicios o evidencias, a fin de establecer e identificar líneas de investigación sobre desaparición de Marlon Gonzalo Amagua Miño.
El Juez Constitucional ordenó que se agiliten los procesos de investigación por parte de la Fiscalía de Rumiñahui, así como también ordenó que la Defensoría del Pueblo designe una persona que realice la vigilancia al debido proceso así como que el Mecanismo de Prevención contra la Tortura de Ecuador, realice una inspección en el Centro Ebenezer por los tratos crueles, inhumanos y degradantes que se están dando en este lugar.
El 16 de julio de 2020, se notificó esta sentencia de hábeas corpus en el que se ordena acciones específicas a Fiscalía. El día 21 de julio de 2020, al ver la falta de actuación e investigación por parte de esta institución, buscamos el número e hicimos una llamada a la Fiscal 1 de Rumiñahui, Dra. Nelly Ramírez, solicitando nos permita revisar el expediente de investigación de nuestro hermano. Nos supo manifestar que no se le ha hecho llegar el expediente físico, que al no tener el expediente físico no tenían conocimiento del caso, que por la pandemia no pudieron avanzar y que nos notificarán en los próximos días. Información que no era cierta ya que desde el día 10 de julio de 2020, en conjunto con la Fundación INREDH ya habíamos ingresado un documento pidiendo las diligencias para la búsqueda, directamente al correo de la Fiscalía y de la Fiscal.
Luego de la constante presión, recién el día de ayer 22 de julio se tomó la versión de Mauricio Amagua, hermano de Marlon, luego de 29 días de su desaparición.  El día de hoy se tomará la versión del director del Centro Ebenezer, principal sospechoso en la desaparición de mi hermano.
Hasta ahora, no hemos podido acceder al expediente ni a ningún documento de la investigación oficial. Es más, desde Fiscalía se nos ha dicho que lo único que tienen en la denuncia del 23 de junio, lo que demuestra la falta de coordinación interinstitucional entre la Dinased y la Fiscalía.
Hasta ahora, no se ha realizado ninguna diligencia de investigación en los terrenos aledaños al Centro Ebenezer que nosotros conozcamos, incluso cuando había una orden judicial de acelerar el proceso de investigación al estar en peligro la vida y la integridad de Marlon.
Solicitamos al Estado, en sus instituciones públicas competentes en la materia, den impulso a las gestiones tendientes al esclarecimiento de este hecho. Cabe recalcar que son 30 días desde que se ingresó la denuncia de desaparición y las respuestas han sido insuficientes y demasiado tardías.
Solicitamos al Estado que tome las medidas pertinentes luego de un mes de no hacerlo, que capacite a sus funcionarios que se han burlado de nuestra denuncia, que actúe inmediatamente mucho más cuando las principales pruebas -como los vídeos de seguridad- ya se han perdido por el pasar del tiempo, que entienda el dolor de los familiares de una persona desaparecida, entienda la naturaleza de esta problemática y dé una respuesta efectiva, inmediata y urgente a nuestro caso y también a los que casos lastimosamente vendrán.
 
Atentamente,
 
Evelyn Amagua y Mauricio Amagua
Hermanos de Marlon Amagua Miño
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