La Sala de la Corte Provincial de Pichincha conformada por los jueces Eduardo Ochoa Chiriboga, Xavier Barriga Bedoya y Carlos Figueroa Aguirre suspendió nuevamente la audiencia de apelación por el delito de tortura en contra del ex estudiante del Colegio Mejía, Angelo Ayol.
El argumento fue que la Sala de la Corte Provincial de Pichincha no notificó a la defensa de David A., subteniente de la Policía Nacional sentenciado a 10 año de prisión por ser el autor directo del delito de tortura cometido contra el menor de edad, para que asista a la audiencia que se tenía previsto que se desarrollé hoy, 8 de febrero de 2019, a las 14:30, en la sala 8, tercer piso de la Corte Provincial de Pichincha, ubicada en el norte de Quito.
Esta es la segunda vez, que la Corte suspende la audiencia, la primera vez fue el pasado 10 de enero de 2019, cuando la defensa de David A. pidió que se difiera la fecha de la diligencia debido al cambio de abogados del caso.
Para el desarrollo de la audiencia que tenía previsto instalarse hoy, acudió Alicia Barros y Bolívar Ayol junto a su hijo. También asistió Freddy F., cabo segundo de la Policía Nacional, sentenciado a 5 años de prisión por el delito de omisión, y varios policías custodiaban la sala.
Tanto para la defensa de la familia Ayol como para la defensa de Freddy F. y para el fiscal del caso David Bermeo la falta de notificación a la defensa del subteniente de la Policía en funciones fue una sorpresa.
Daniel Véjar, coordinador jurídico de Inredh y abogado de la familia Angelo Ayol, lamenta que el sistema justicia mantenga a la expectativa a las víctimas para acceder a justicia por un delito de tortura y la enorme lesividad que esto trae para la familia Ayol. A pesar que se obtuvo un resultado favorable en primera instancia, la familia no puede cerrar los impactos que tuvieron los hechos del 17 de septiembre de 2014 en sus vidas sin una sentencia ejecutoriada. «Ya se probó en juicio las crisis de angustia y el malestar que implica para Angelo y su familia el tener que revivir, de alguna manera los hechos –dice Véjar-. Estas suspensiones solo aumentan el malestar para la familia quienes siguen esperando una respuesta del sistema de justicia desde 2014».
La suspensión de la audiencia generó indignación y dudas a la madre de Angelo Ayol. “No es posible que por segunda ocasión suspendan la audiencia – dice Barros-. Llevamos casi cinco años buscando justicia, no es justo”.
La familia Ayol asegura que no se rendirá. «Seguiremos hasta donde tengamos que llegar para conseguir justicia» indica Bolívar Ayol, resuelto a no abandonar la judicialización de este caso.